Un padre enamorado de lo que vive en Montessori
Ángel Luis Ortiz lleva cuatro años en la filosofía y exhorta a otros padres a vivir lo que él vive.
Por Andrea Santiago Vicente
Ángel llega a la escuela Montessori Juana Sánchez en Juncos para matricular a Jeykiriany de 3 años en Casa de Niños. En su visita a la casa abierta, el silencio en el plantel, la manera en que presentaban las materias, el respeto entre los niños y la cantidad de programación para los padres a través de Casa Familiar, fueron suficientes para decidirse por Montessori.
‘’Al traerla, ella estaba emocionada con la escuela. Conocimos a su maestra, Ms. Ortiz. Comenzó su primer día de labor y cuando vinimos a recogerla no se quería ir’’, nos contó Ángel de ese primer día de Jeykiriany.
Ahora, cuatro años después, por las mañanas, no solo lleva a Jeykiriany, sino también a su hermano Lezvany, quien se une a la experiencia Montessori tras sentirse satisfecho con la filosofía.
Jeykiriany es una niña de 7 años a la que Ángel describe como callada, cariñosa y futura empresaria. En cambio, Lezvany tiene 6 años y, según nos cuenta, es muy activo y apasionado por la historia, los planetas y los estudios. Ambos llegaron a la vida de Ángel y su familia con meses de nacido para criarlos.
Junto a su esposa, Ángel tiene tres hijos, ya adultos, y todos estudiaron en la escuela pública tradicional. Esto le permite tener experiencia en dos métodos de enseñanza, a lo cual él mencionó que Jeykiriany y Lezvany son más cariñosos, dialogan de una manera distinta y están al pendiente de su alrededor; cosas que no experimentó con sus otros tres hijos.
‘’Yo vivo tan feliz de vivir la experiencia de Montessori. A veces la gente me pregunta, por qué esos nenes son tan sociables, cariñosos, respetuosos. Y yo: pues, que están en una escuelita Montessori’’.
Nos dice que tener a sus niños en la filosofía, a él como padre le da felicidad, porque los ve felices, logrando sus metas y desarrollándose. Con una gran alegría mencionó: ‘’A mis niños les encanta la escuela. Están como el papá, le encanta la escuela’’.
La expresión de encantarles la escuela va más allá del ambiente de clases, dice que en medio de su proceso de crianza, Casa Familiar es y ha sido importante, ya que le han brindado las herramientas para calmar sus preocupaciones en medio de la crianza, han contestado cada una de sus preguntas y le han brindado un gran apoyo.
Desde el primer día, el espacio y el acompañamiento provisto por Casa Familiar le ha guiado en el proceso de calmar sus preocupaciones respecto a la crianza de sus hijos adoptivos. El conocimiento de las especialistas de Casa Familiar ha sido clave para poder explicarles a sus niños que él no es el padre biológico y otras tantas preguntas que surgen en el proceso que describió como “fuerte’’, pero aceptó que sin el apoyo de la comunidad no hubiera podido hacerlo.
A través de este mismo programa, ha tomado una serie de talleres sobre la prevención de la violencia y maltrato, seguridad en la escuela, relaciones interpersonales en la comunidad, entre otros. Las familias pueden encontrar estos espacios de paz y sosiego gracias a los servicios brindados por Casa Familiar, una estrategia del Programa Escuelas para la Paz del Instituto Nueva Escuela ( INE).
En fin, para él la filosofía es maravillosa. Le encanta el ambiente, como todo es positivo, la manera en que se resuelven las situaciones y porque lo que ve y vive le hace crecer como individuo.
‘’Yo le recomendaría a los padres que busquen información de la escuela.Que vivan lo que yo vivo; la emoción de tener sus hijos en una escuela Montessori. De ver la alegría de esos nenes todo el tiempo, ese deseo de venir a la escuela todos los días a hacer su trabajo, sus funciones. Si los padres vieran y conocieran más de la escuela, seguro lucharían para que Montessori público siguiera creciendo como estamos luchando nosotros para que crezca.’’
Sin duda alguna, Ángel L. Ortiz es un Rostro de los muchos padres que son testigos de que Escuela a Escuela, se construye Un Nuevo Puerto Rico.